Cupcakes de castaña…

Cómo me gusta el otoño!!… La verdad es que ya llevo unos días viendo los puestos de castañas asadas por la calle y me empezaban a apetecer, así que he decidido comprarme unas poquitas en el Carrefour (a 7,90 €/ Kg 🙂 ) y me he puesto manos a la obra. Después de rebuscar por internet encontré un par de recetas que tenían buena pinta, como suelo hacer,  tomé un poquito de esta y algo de la otra y aquí tenéis el resultado…

Ninguno de mis platos me parecía lo suficientemente rústico para presentar unos cupcakes de castaña, así que al final me decidí por el reloj de la cocina 🙂

Ingredientes:

CUPCAKES.
  • 120 g de harina
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
  • 110 g de mantequilla
  • 100 g de azúcar blanco
  • 100 g de azúcar moreno
  • 2 huevos (a temperatura ambiente)
  • 100 g de puré de castañas. Cocer 150 g de castañas peladas en 80 ml de leche unos 10 minutos, hasta que las castañas estén tiernas y triturarlas (con esto salen unos 200 g de puré)
  • 125 ml de buttermilk. Si no podéis conseguirla os doy un sustituto que nos puede servir: 125 ml de leche entera + 1/2 cucharada de vinagre blanco, mezclar y dejar reposar durante unos 15 minutos
  • 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
 BUTTERCREAM.
  • 250 ml de leche entera
  • 40-50 g de harina (sobre unas 5 cucharadas)
  • 200 g de azúcar
  • 220 g de mantequilla
  • Chocolate de cobertura

Método:

CUPCAKES.

1. Precalentar el horno a 175ºC

2. Mezclar en un bol la harina y el bicarbonato sódico.

3. Preparar la  buttermilk y añadirle la vainilla.

4. En un bol grande batir la mantequilla, añadir el azúcar blanco y el moreno y seguir batiendo hasta conseguir una mezcla esponjosa. Añadir los huevos, uno a uno, mezclando bien uno antes de echar el siguiente. Incorporar el puré de castañas y mezclar.

5. Añadir a la mezcla anterior la mezcla del punto 2 poco a poco, alternando con la buttermilk.

6. Repartir entre los moldes de papel, llenándolos hasta unos 2/3 de su capacidad.

7. Honear durante unos 20-25 minutos.

 BUTTERCREAM.

1. Disolver la harina en la leche y poner a fuego medio. Calentar, revolviendo con una varilla, hasta obtener una masa espesa.

2. Añadir el azúcar y calentar al baño María hasta que esté disuelto y dejar enfriar. Una vez frío, añadir la vainilla

3. Batir la mantequilla y añadir la mezcla anterior. Seguir batiendo hasta conseguir una masa homogénea.

4. Untar el interior de la manga pastelera con chocolate derretido.

5. Llenar la manga con la buttercream y decorar a gusto. Esperar a que la buttercream esté fría para poder manejarla mejor.

Una sugerencia: reservar algunas castañas cocidas, deshacerlas con los dedos (no triturarlas) y añadírselas a la masa final. Es una idea que se me ocurrió cuando ya estaban en el horno y que seguro que les da aún más sabor.

A disfrutarlas… 🙂

Sunday breakfast and the buttercream recipe you will love…

(Go to spanish version)

When you open your eyes and the morning sun paints with this light the walls of your room…

… and when you lift the shade you find this terrace that calls you … «Come, enjoy this sunny morning» …

You can not but accept the offer and go out… with «something to eat» … 🙂

Breakfast was a piece of the pie I made for dinner we organized on Saturday at home with friends.

The recipe is the same as the chocolate cake with strawberries, but in this case instead of covering it with chocolate I made it with a buttercream that, in the opinion of the guests, was very good. It´s not the first time anyone asks me the recipe and even some people have confessed that they would eat with a spoon 🙂 … So, I decided to prepare this post to explain how you can make it, because it´s a mixture of several recipes that I’ve found over there …

The buttercream you will love. Recipe

Ingredientes:

  • 250 ml whole milk
  • 40-50 g flour (about 5 Tbsp)
  • 200 g de powdered sugar
  • 220 g de butter
  • Whatever you like… strawberries, blackberries, blueberries, raspberries,… or just some drops of vanilla essence. To make this cake I used about 300 g strawberries.

¿Qué es lo que hay en el otro plato?… Los recortes del bizcocho, mojados en leche están de vicio…:)

Method:

1. Dissolve flour in milk and place over medium heat. Stir until obtaining a thick dough.

2. Add the sugar and heat it in a bain-marie (water bath)

3. Chop the strawberries (or fruit you have chosen) and beat them. Pour into a saucepan, heat over medium heat until boiling and keep boiling for about 10 minutes. This way, some water will evaporate and the flavor of the fruit will be more concentrated.

3′ In the case of vanilla buttercream, we must allow to warm the mixture of point 2, add a teaspoon of vanilla extract (or more if we want a more intense flavor) and go to step 5.

4. Add the concentrate fruit puree to the mixture of point 2 and let cool.

5. Beat the butter and add the above mixture (warm). Continue beating until creamy and smooth.

.. and ready! … A buttercream everybody likes, which can be used with any dessert and that, besides the flavor, has other advantages:

  • You use less sugar and less butter than with the classic recipes of buttercream.
  • No eggs are used. Some recipes add egg whites but it´s an ingredient that does not give me much confidence, especially in summer.
  • The texture is very soft. The sugar melts when you heat it with milk and flour and you can not feel the grains. In the classic recipe, sugar is added directly to the butter and beat, people who know how to do this can obtain a great texture but it is not easy to get it.

Enjoy it … and if you prepare it, please come back here and tell me if you liked it 🙂

Desayuno de domingo y receta de la buttercream que enamora…

(Go to english version)

Cuando abres los ojos y el sol de la mañana pinta con esta luz las paredes de tu habitación…

… y al levantar la persiana te encuentras con esta terracita que te llama… ven, disfruta del solecito de la mañana,…

No puedes más que aceptar la oferta y salir… con «algo para picar»… 🙂

El «picoteo» (más bien desayuno) fue un trozo de la tarta que preparé para la cena que organizamos el sábado en casa con unos amigos.

La receta es la misma que la de la tarta de chocolate con fresas, pero en este caso en vez de recubrirla con chocolate lo hice con una buttercream que, a juicio de los comensales, estaba muy buena. No es la primera vez que alguien me pide la receta y hasta hay quien ha confesado que se la comería a cucharadas :)… así que dado su éxito he decidido dedicarle este post y explicaros cómo se hace, ya que realmente es la mezcla de varias recetas que me he ido encontrando por ahí…

La buttercream que enamora 🙂 Receta

Ingredientes:

  • 250 ml de leche entera
  • 40-50 g de harina (sobre unas 5 cucharadas)
  • 200 g de azúcar e polvo
  • 220 g de mantequilla
  • Ingrediente a gusto del consumidor… fresas, moras, arándanos, frambuesas,… o simplemente unas gotas de esencia de vainilla. Para la tarta de arriba yo utilicé unos 300 g de fresas.

¿Qué es lo que hay en el otro plato?… Los recortes del bizcocho, mojados en leche están de vicio…:)

Método:

1. Disolver la harina en la leche y poner a fuego medio. Calentar, revolviendo con una varilla, hasta obtener una masa espesa.

2. Pasar la mezcla anterior a un bol, añadir el azúcar y calentar al baño María hasta que esté disuelto y no se noten los granos (si usáis azúcar glas no haría falta poner al baño María porque ya se disuelve instantáneamente)

3. Trocear las fresas (o la fruta que hayamos elegido) y batirlas. Verter en un cazo, calentar a fuego medio hasta que hierva y mantener el hervor durante unos 10 minutos. Con esto conseguimos que se evapore parte del agua y que se concentre el sabor de la fruta.

En el caso de la buttercream de vainilla, hay que dejar templar la mezcla del punto 2, añadirle una cucharadita de esencia de vainilla (o más si queremos un sabor más intenso) y pasar al punto 5.

4. Añadir el puré de fruta concentrado a la mezcla del punto 2  y dejar templar.

5. Batir la mantequilla y añadir la mezcla anterior (templada). Seguir batiendo hasta conseguir una crema homogénea.

… y lista!!… Una buttercream que gusta mucho, que se puede usar con cualquier postre y que, además del sabor tiene, a mi modo de ver otras ventajas:

  • Se usa menos azúcar y menos mantequilla que en las recetas clásicas de buttercream.
  • No se usan huevos. Hay recetas que añaden claras de huevo pero a mí es un ingrediente que no me da demasiada confianza, sobre todo en verano.
  • La textura es muy suave. El azúcar se derrite al calentarlo con la leche y la harina y no se notan los granos, en la receta clásica el azúcar se añade directamente a la mantequilla y se bate, a la gente que sabe hacerla le queda una textura estupenda pero no es fácil conseguirlo.

A disfrutarla… y si la hacéis, por favor pasaros y contadme si os ha gustado 🙂

Tarta de chocolate y café con relleno de Oreo

He de reconocer que no las tenía todas conmigo cuando decidí hacer esta tarta, eso del café no me acababa de convencer… nunca había añadido tanto a una receta y no quería que su sabor fuera el predominante.

Una vez visto el resultado creo que voy a empezar a echar café a todo lo que haga :D… al menos a todo lo que lleve chocolate, es increible como intensifica su sabor y hace que el bizcocho quede menos seco, más jugoso, vamos, todo un descubrimiento.

Bueno, no me enrollo más que ya es muy tarde y prometí que hoy colgaba la receta, que la disfrutéis…

Ingredientes:

Para el bizcocho:

240 g de harina (2 cups)

400 g de azúcar (2 cups)

95 g de cacao (1 cup)

6 g de bicarbonato sódico (1 tsp)

4 g de levadura (1 tsp)

6 g de sal (1 tsp)

2 huevos batidos

125 ml de aceite vegetal (1/2 cup)

250 ml de leche entera (1 cup)

250 ml de café caliente (1cup)

Para la buttercream:

250 ml de leche entera (1 cup)

38 g de harina (5 Tbsp)

5 ml de vainilla (1 tsp). Se puede añadir más si se quiere un sabor más intenso, a gusto del consumidor 🙂

200 g de azúcar glass (1 cup)

226 g de mantequilla (1 cup)

6 o 7 galletas Oreo machacadas (sin el relleno)

Para la cobertura:

190 ml de nata (3/4 cup)

56 g de mantequilla (1/4 cup)

150 g de chocolate para fundir (3/4 cup). He descubierto que las pepitas de chocolate son lo mejor para fundir (más vale tarde que nunca :))pero también se puede usar chocolate en tableta.

Método:

Preparación del bizcocho:

1. Precalentar el horno a 170 ºC

2. Engrasar dos moldes de unos 18 cm de diámetro y empolvar con harina o cacao (yo sólo tenía uno así que hice dos hornadas). Se podría hacer un solo bizcocho y dividirlo pero quedaría una tarta más baja.

3. En un bol grande mezclar todos los ingredientes secos: harina, azúcar, cacao, bicarbonato sódico, levadura y sal

4. En otro bol mezclar los huevos batidos, el aceite y la leche.

5. Añadir la mezcla anterior a la de ingredientes secos, batiendo hasta conseguir un resultado homogéneo.

6. Por último, añadir el café caliente y mezclar.

7. Dividir la mezcla entre los dos moldes y hornear durante unos 45 min.

8. Dejar enfriar un poco y desmoldar. Nivelar la parte superior cortando la caperuza que hayan hecho los bizcochos al crecer.

Preparación de la buttercream:

1. Disolver la harina en la leche y poner a fuego medio. Calentar, revolviendo con una varilla, hasta obtener una masa espesa.

2. Añadir el azúcar y calentar al baño María hasta que esté disuelto y dejar enfriar. Una vez frío, añadir la vainilla. La receta original añade el azúcar al final, con la mantequilla, pero haciéndolo así conseguimos que no se noten los granos.

3. Batir la mantequilla y añadir la mezcla anterior. Seguir batiendo hasta conseguir una masa homogénea.

Preparación de la cobertura:

1. Calentar la nata y la mantequilla a fuego lento.

2. Antes de que empiece a hervir, sacar del fuego, añadir el chocolate y mezclar.

Y ahora, a montar la tarta

1. Apartar 4 o 5 cucharadas de la buttercream y mezclarlas con las galletas Oreo.

2. Extender esta mezcla sobre uno de los bizcochos y tapar con el otro.

3. Usar el resto de la buttercream para cubrir la tarta. En este enlace de El rincón de Bea lo explica perfectamente, y con fotos 🙂

4. Dejar enfriar en la nevera unos 15 minutos y añadir la cobertura de chocolate.

Lista para zampar…!! 🙂

Cupcakes de plátano con buttercream de caramelo

Tener una jarra de caramelo en la alacena es una tentación… las ganas de meter el dedo son demasiado fuertes… ese color dorado… ese sabor inconfundible… esa textura…. Resumiendo, que tenía que hacer algo con él si no quería acabar con un subidón de glucosa en sangre de los que hacen historia 🙂

Así que, buscando, buscando encontré esta receta de una bloguera sueca que me encanta: Linda de Call me cupcake. Tenéis que visitar su página, las fotos son estupendas, dan ganas de ponerte a lamer la pantalla 😀

Para el bizcocho he seguido su receta, pero la buttercream la he adaptado un poquito.

Ingredientes:

(Salen unos 30 cupcakes)
Para los cupcakes:

360 g de harina (3 cups)

10 g de bicarbonato sódico (1 1/2 tsp)

4 g de levadura (3/4 tsp)

5 g de sal (3/4 tsp)

4 g de canela (1 tsp). Yo me olvidé de añadírsela 😦 … aún así están deliciosos así que con ella ni me imagino lo ricos que deben de quedar.

175 g de mantequilla

270 g de azúcar moreno (1 1/2 cup)

3 huevos grandes

6 plátanos grandes muy maduros triturados (sobre 2 cups)

190 ml de buttermilk (3/4 cup). Por esta parte de Europa no es fácil encontrar buttermilk, al menos yo no la he visto nunca, así que os doy un sustituto que nos puede servir: 190 ml de leche entera + 10 ml (3/4 Tbsp) de vinagre blanco, mezclar y dejar reposar durante unos 15 minutos

2,5 ml de extracto de vainilla (1/2 tsp)

160 g de nueces troceadas (1 cup)

Para la buttercream de caramelo:

200 g de mantequilla a temperatura ambiente

200 g de azúcar glas

125 ml de leche entera (1/2 cup)

8 cucharaditas de caramelo líquido (aprox.)

Método:

Preparación de los cupcakes:

1. Precalentar el horno a 175 ºC

2. Mezclar en un bol la harina, el bicarbonato sódico, la levadura, la sal y la canela. Tamizar la mezcla.

3. En otro bol mezclar la buttermilk, los plátanos machacados y la vainilla.

4. Batir la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla esponjosa. Añadir los huevos uno a uno y seguir batiendo.

5. Añadir los ingredientes secos (mezcla del punto 2) y los húmedos (mézcla del pundo 3) a la mezcla del punto 4 poco a poco, alternándolos y batiendo a velocidad baja.

6. Rellenas con la mezcla los moldes para cupcakes hasta aproximadamente 2/3 de su capacidad

7. Hornear a 175 ºC durante unos 20 minutos

Preparación de la buttercream de caramelo:

1. Calentar a baño María el azúcar con la leche hasta que al tocar no se noten los granos.

2. Batir la mantequilla, añadir la mezcla anterior y seguir batiendo hasta obtener una mezcla homogénea.

3. Añadir el caramelo líquido cucharada a cucharada hasta obtener el sabor y la textura deseadas.

…y ya sólo queda decorar los cupcakes con la buttercream y adornar al gusto.

Intentad hacerlos, os garantizo que el bizcocho está sencillamente delicioso. La buttercream sabe exactamente igual que los caramelos de toffee,… sí, esos que te daba rabia comer porque se te pegaban a los dientes, pero que estaban taaaan buenos que al final no te podías resistir :)… sí, lo confieso, lo que ha sobrado me lo he comido a cucharadas 😀

Tarta de chocolate con fresas

«¿Fresas? -os preguntaréis- ¿a estas alturas del año?»… pues sí, fresas en febrero, ¡flipante!…y unas fresas deliciosas, de las mejores que he probado en mi vida.

La explicación va dedicada a mis amigos del norte, porque por allá estas cosas no se ven y lo mismo no me creen 🙂  Yo, sin ir más lejos, hace ya un par de semanas que empecé a ver estos tremendos fresones  en el super, pero no me atrevía a comprarlos porque me parecía increible que pudieran estar buenos… pues doy fe, lo están 🙂

Ingredientes:

Para el bizcocho:

160 g de chocolate de cobertura negro

140 g de harina

20 g de harina de maiz (a partir de ahora le llamaré Maizena, es la marca más conocida -al menos en España-, personalmente yo es la única que conozco de toda la vida)

40 g de cacao

170 g de azúcar

100 g de mantequilla

6 huevos

10 g de levadura

Para el relleno:

270 g de fresas

110 g de mantequilla

190 g de azúcar en polvo

Para la cobertura:

150 g de chocolate de cobertura (fondant)

150 ml de nata para montar

75 g de mantequilla

Método:

Preparación del bizcocho:

Es muy similar al de la Tarta Sacher, aunque un poco más esponjoso.

1. Derretir el chocolate y la mantequilla juntos y dejar enfriar la mezcla. Se puede hacer al baño María o en el microondas, es este último caso tened mucho cuidado de que el chocolate no llegue nunca a hervir.

2. En un bol batir las yemas con la mitad del azúcar, añadírselo a la mezcla anterior (que debe estar templada) y batir todo bien hasta obtener una pasta homogénea.

3. En otro bol juntar la harina, la Maizena, el cacao y la levadura, tamizarla (podéis usar un colador) e irla incorporando a la mezcla anterior poco a poco. La masa que os queda después de este paso es bastante dura, la primera vez pensé que me había equivocado y había echado demasiada harina, no os preocupéis, eso se arregla en el punto 5.

4. Montar las claras a punto de nieve y, casi al final, añadirles el azúcar restante.

5. Añadir poco a poco las claras montadas a la mezcla del punto 3, mezclando con mucho cuidado (sin batir), sólo envolviendo. Hemos pasado el trabajo de montar las claras, si ahora batimos fuerte habrá sido trabajo en balde 🙂

6. Untar el interior del molde con mantequilla y harina para evitar que se pegue la tarta.

7. Añadir la mezcla y meter en el horno a 170ºC durante unos 50 minutos. Comprobar con un pincho o cuchillo que está hecho antes de sacarlo.

8. Dejar enfriar un poco y desmoldar. Nivelar la parte superior cortando la caperuza que haya hecho el bizcocho al crecer (esto está buenísimo con leche, para desayunar o cenar :). Darle la vuelta para que la parte más llana quede arriba y así tenga mejor aspecto. Dividir en 2 o 3 capas dependiendo de lo alta que nos haya quedado, vaya, del diámetro del molde. Yo utilicé un molde de 23 cm de diámetro.

Preparación del relleno:

1. Triturar 150 g de fresas con una batidora, vaciar en una olla y poner al fuego, dejar que hierva durante unos 15-20 minutos. Con esto conseguimos evaporar parte del agua y concentrar el sabor de la fresa.

2. Vaciar el puré de fresa en un bol apto para el baño María (ojo con los de cristal de los chinos, algunos rompen, lo digo por experiencia 🙂 ). Añadir el azúcar y poner a baño María hasta que, al tocar, no notemos los granitos del azúcar. Éste es un consejo estupendo que saqué de Cakes Haute Couture, para evitar que en la buttercream se perciba el grano del azúcar. Dejar enfriar este puré hasta que esté a temperatura ambiente.

3. Batir la mantequilla (que debe estar en punto pomada, es decir, blandita pero no derretida) con la mezcla del punto 2 hasta obtener una crema homogénea.

… y ahora sólo nos queda montar la tarta…

1. Rellenar la tarta con la crema y sobre ella colocar el resto de las fresas fileteadas. Cubrir con la otra mitad del bizcocho.

2. Bañar con la cobertura de chocolate. Os remito a la receta de la tarta Sacher, porque la cobertura es la misma.

Lo más interesante de esta receta… el intenso sabor a fresa de la crema :), tenéis que probar a hacerla, creo que me la podría comer a cucharadas… 😀

La pequeña sorpresa de este post, es que ésta fue mi «tarta de boda»… 🙂  No fue una boda al uso (los que me conocéis ya lo sabéis así que no me voy a extender más explicándolo), el caso es que el sábado celebramos una comida con unos amigos y se me ocurrió hacer mi primer intento de tarta de tres pisos!!!…..

Montarla fue toda una odisea, pero llevarla al restaurante en coche… ilusa de mí, no contaba con las maravillosas carreteras empedradas, los baches,… resumiendo, que la tarta llegó con uno de los pisos sobre la guantera, los otros dos en mi regazo y la mitad de las fresas que había puesto por fuera para adornar, esparcidas en el suelo del coche… 🙂

Afortunadamente en el restaurante se portaron muy bien, me la guardaron en la cámara y repusieron las fresas «perdidas», con todo y con eso, la susodicha tarta quedó de esta guisa… no está mal, pero os aseguro que tenía mejor pinta cuando salió de casa 🙂

Cupcakes de zanahoria con buttercream de queso…

“…Uy!, qué raro suena eso!” -es lo primero que dijo mi novio cuando le conté lo que estaba haciendo…

“Ésto está de vicio, mañana se lo llevo a los del trabajo, seguro que no quedan ni las migas…” -eso es lo que dijo después de probarlos 🙂

¿Intrigados?… pues aquí os dejo la receta, para que los probéis y salgáis de dudas 🙂

La receta de los cupcakes la he tomado prestada de una web estupenda que últimamente consulto mucho, es de Alma, una chica que se dedica a hacer cupcakes (entre otras muchas lambonadas 🙂 -esta palabra creo que es gallega… os la traduzco: dícese de todas las cosas dulces y deliciosas-). El buttercream lo modifiqué un poquito para que fuera menos dulce… creo que quedó bien, pero ya me comentaréis los probadores oficiales 🙂

Ingredientes:

Para los cupcakes:

140 g de harina

1 cucharadita de bicarbonato sódico

1 cucharadita de canela

2 huevos

115 g de azúcar

120 ml de aceite de oliva. Usad un aceite de oliva suave para que no le de demasiado sabor a los cupcakes, si no lo tenéis usad aceite de girasol.

150 g de zanahoria

140 g de manzana

5 nueces troceadas

En la receta original se le añade también 60 g de pasas, a mí no me gustas así que he eliminado este ingrediente 🙂

Para la buttercream:

100 g de queso tipo Philadelphia. No compréis del desnatado porque sin grasa la buttercream no va a montar bien y no lo saquéis de la nevera hasta necesitarlo.

50 g de mantequilla a temperatura ambiente

150 g de azúcar glas

Método:

Preparación de los cupcakes:

1. Mezclar en un bol la harina, la canela y el bicarbonato sódico. Mezclar muy bien estos ingredientes para evitar zonas con una alta concentración de bicarbonato… ¿por qué?… pues por lo que he leído en alguna web, parece ser que el bicarbonato puede hacer que la zanahoria cambie a un color verde (nada apetitoso), el resultado es igualmente comestible, pero la apariencia más bien mala. Si el bicarbonato está bien distribuido no deberíais de tener este problema.

2. En otro bol batir los huevos con el azúcar y el aceite.

3. Pelar las zanahorias y la manzana y rallarlas. Intentar hacer este paso lo más tarde posible pare evitar que se oxiden en contacto con el aire.

4. Tamizar la mezcla del paso 1 y añadirla a la del paso 2, mezclando bien para conseguir una masa homogénea.

5. Incorporar la zanahoria y la manzana, mezclar y, finalmente, añadir las nueces.

6. Rellenar los moldes hasta aproximadamente 3/4 de su capacidad.

7. Introducir en el horno (precalentado a 160ºC) durante 20-25 minutos (a mí me llevó un poco más de 25min, pero mi horno no es demasiado bueno, creo que pierde calor por algún lado 😦 ). En cualquier caso, echadles un vistazo a los 20 min, porque parece ser que se puden quemar con facilidad.

8. Sacar del horno los cupcakes y dejarlos enfriar.

Preparación de la buttercream:

1. Batir la mantequilla con el azúcar hasta obtener una masa homogénea. Sí, lo sé, dije que no volvería a hacer una buttercream hasta no tener una batidora de varillas, pero soy una matada, y la he vuelto a hacer con mi batidora de cuchillas de toda la vida… que traballiño… 😦 

2. Añadir todo el queso crema, que debe de estar bien frío y batir hasta tener una masa blanca y cremosa.

Una vez que los cupcakes estén fríos, decorar con la buttercream… y lo que queráis: canela, nueces picadas, una zanahoria hecha de fondant o mazapán,… eso ya es cuestión de la imaginación de cada uno y de la disponibilidad de ingredientes 🙂

Nota: La buttercream les da un sabor muy bueno, pero tenéis que probarlos sin ella, el bizcocho en sí está de vicio… estoy pensando en hacerlo en versión tarta 🙂

Cupcakes de chocolate con buttercream de frambuesa

¡Mis primeros cupcakes!,… bueno, los segundos, hace un par de meses lo intenté con otra receta pero la experiencia no fue muy buena 🙂

Esta vez creo que han quedado bastante bien: el aspecto es bueno y las opiniones de quienes los han probado también :), así que me doy por contenta 🙂

Los que no estéis muy familiarizados con la repostería os preguntaréis qué es un cupcake, qué tiene que ver con eso que llamo buttercream y por qué demonios le tenemos que dar nombres ingleses a las recetas con lo bonito que es el castellano :). En cuanto a esto último estoy completamente de acuerdo, el problema es que para traducirlos no me llega con una palabra: pastel de taza (cupcake), crema de mantequilla (buttercream) y me niego, es una cuestión de economía de lenguaje 🙂 Alguno me dirá que al cupcake podría llamarle magdalena… pero no, no es lo mismo, las masas son diferentes y van menos batidos, además llevan muy poca o ninguna levadura para evitar que formen copete y así poder decorarlos mejor. Así que lo dicho, por ahora y a espera de que la R.A.E. invente algo mejor, me quedo con los términos en inglés, al fin y al cabo los inventaron ellos (los americanos), deámosles el crédito 🙂

Antes de escribirla receta he de advertiros que sería recomendable,… muy recomendable,… extremadamente recomendable, que tuvierais una batidora de varillas para hacer la buttercream. Yo lo he hecho con la batidora de cuchillas de toda la vida (es la única que tengo) y he sudado de lo lindo para conseguir la consistencia adecuada… no me han quedado ganas de repetirlo, si en un futuro cuelgo otra receta con buttercream sabréis que me he comprado una batidora de varillas

No me enrollo más, ahí queda la receta:

Ingredientes (para 12 cupcakes):

Para los cupcakes:

25 g de maicena

185 g de harina

150 g de azúcar

35 g de cacao

1 cucharadita de bicarbonato sódico

1/2 cucharadita de sal

315 ml de agua

77 ml de aceite vegetal

15 ml de vinagre

1 vaina de vainilla ( o 1 cucharadita de esencia)

Para la buttercream:

200 g de mantequilla (a temperatura ambiente)

350 g de azúcar glas

10 cucharadas de mermelada de frambuesa (se puede echar más o menos, al gusto de cada uno)

1 cucharada de leche

1 vaina de vainilla ( o 1 cucharadita de esencia)

Método:

Preparación de los cupcakes:

1. Poner en un bol todos los ingredientes secos (maicena, harina, azúcar, cacao, bicarbonato y sal) y mezclarlos

2. En otro bol mezclar todos los ingredientes líquidos: agua, aceite, vinagre y la esencia de vainilla (o las semillas si usamos una vaina)

3. Ir añadiendo la primera mezcla sobre la segunda y mezclando. No os preocupéis porque el resultado final os parezca demasiado líquido, tiene que serlo.

4. Finalmente, rellenar los moldes con la mezcla hasta aproximadamente 2/3 de su capacidad.

5. Hornear a 180ºC durante 20-25 min.

Preparación de la buttercream:

1. Batir juntos la mantequilla y el azúcar. Como os dije antes, aquí las varillas son casi imprescindibles.

2. Añadir la mermelada de frambuesa. Se puede aumentar la cantidad pero siempre teniendo en cuenta que la buttercream no se quede demasiado líquida.

3. Añadir la leche y la esencia de vainilla (o las semillas si usamos una vaina). Si en este punto vemos que la buttercream está muy espesa podemos añadir una cucharada más de leche para ajustar su consistencia.

4. Batir hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.

Un problema bastante común a la hora de hacer la buttercream es que se os quede con un aspecto como de «cortada», grumosa. No está todo perdido, sólo hay que seguir batiendo y al cabo de un rato vuelve a coger su textura correcta. 🙂

Una vez los cupcakes se hayan enfriado, decorarlos con la buttercream y las frambuesas enteras.

No os voy a decir que son muy fáciles de hacer, porque todo depende de las herramientas que tengáis (batidora)… lo que sí os puedo decir es que, sinceramente, «están mu buenos» 🙂